Gambas blancas, langostinos, cigalas, camarones, patas de cangrejo, carabineros… si te apasiona el marisco, esta ruta te va a encantar. La gastronomía onubense no se entiende sin las gambas de Huelva, cigalas o los langostinos, que acompañados de un buen vino del Condado son todo un regalo en nuestro paladar.
La ruta comienza en la maravillosa Punta Umbría. Allí visitaremos su lonja, donde cada día se subastan toneladas de pescado y marisco, especialmente gambas. Será toda una experiencia. Y antes de irnos daremos un pequeño paseo por su ría, observando la actividad de los pescadores y de sus gentes, para así poder entender la importancia del mar en la vida de Punta Umbría.
A continuación, un lugar idílico que no necesita promoción turística en Huelva, donde el tiempo se detiene, oler a mar y tomar el sol en cualquiera de sus rincones. El Rompido es un pueblo muy tranquilo con una gran tradición pesquera. Por eso, mientras damos un paseo en barco por el entorno de la Flecha de El Rompido, lengua de arena natural de unos 12 kilómetros separa la desembocadura de Río Piedras de Océano Atlántico, la baña en una playa totalmente virgeny maravilla a quienes lo visitan, asombrados por su entorno y unas vistas inolvidables, disfrutaremos de una degustación de marisco de Huelva, acompañado de una copa de vino de nuestro Condado. Un auténtico placer para los sentidos. Para finalizar nos desplazaremos hasta el Puerto de Huelva. Junto a la Ría de Huelva conoceremos la importancia que tiene el Puerto en la economía de Huelva y qué peso tiene el marisco, sobre todo, las gambas.
